La protección de datos personales investigó el uso de las redes sociales por parte de las organizaciones políticas para las elecciones parlamentarias de 2021. En un dictamen en esa ocasión se discute el procesamiento de información personal para delimitar los grupos objetivo y dirigir el marketing hacia ellos. El dictamen cubre las ocho organizaciones políticas que tuvieron miembros del parlamento elegidos en las elecciones, y su objetivo es investigar si las organizaciones políticas han cumplido con el dictamen anterior de la Autoridad de Protección de Datos sobre el tema en cuestión del 5 de marzo de 2020, es decir, En relación con las elecciones parlamentarias de 2016 y 2017, el examen de las elecciones de 2021 por parte de la Autoridad de Protección de Datos se limitó a consideraciones de transparencia, por un lado, y de proporcionalidad, por otro.
En general, las organizaciones políticas sólo utilizaron parámetros de carácter muy general, es decir rango de edad y ubicación aproximada. Una categoría, es decir La coalición, sin embargo, destacó, sobre todo por el uso extensivo de perfiles personales basados en el registro de los intereses de los usuarios por parte de Facebook, pero también por el uso de otros tipos de información sobre el comportamiento en línea. Luego Viðreisn utilizó esa información hasta cierto punto.
No se hicieron comentarios específicos sobre la educación brindada por las organizaciones políticas, pero en general publicaron una política de privacidad en su sitio web y brindaron información adicional junto con anuncios. En lo que respecta al uso de información sobre el comportamiento en línea, se consideró que debía obtenerse el consentimiento de los usuarios y que la responsabilidad de proporcionar información al respecto recaía no sólo en los medios sociales pertinentes, sino también en las organizaciones políticas. ellos mismos que utilizaron dicha información, es decir las dos categorías antes mencionadas.
No se consideró posible confiar en que las personas registradas hubieran dado su consentimiento a estas dos categorías de conformidad con las exigencias de transparencia, pero también se consideró que debía tenerse en cuenta el carácter cercano del tratamiento en cuestión. A este respecto, además del requisito de que el uso de perfiles personales fuera compatible con los valores democráticos, también se comprobó si se había respetado la proporcionalidad.
Teniendo en cuenta que todavía se espera una solución a nivel paneuropeo, lo que será importante en este contexto, la Autoridad de Protección de Datos señaló que no hay motivo para utilizar los poderes de la agencia a este respecto, pero recordó la importancia de cumplir con los puntos de vista descritos en el dictamen, independientemente de qué red social se haya utilizado en cada momento.